El 4 de abril Tesla consiguió un nuevo récord, superar a uno de sus rivales en el sector automovilístico más fuertes, en lo que a cotización bursátil se refiere. Se trata de Ford, la empresa estadounidense que ha tenido que dejar paso al imparable ritmo de las acciones sobre coches eléctricos.
A pesar del imponente volumen que implica el Grupo Ford a nivel empresarial, Tesla consigue un ritmo de crecimiento mucho más rápido. Superó con cierta facilidad a Fiat Chrysler, con respecto a la que ha llegado a duplicar en valoración, acaba de superar a Ford y el próximo reto es desbancar a General Motors de la primera posición.
Precisamente General Motors no se encuentra en su momento más fuerte, con la reciente venta de Opel en busca de nuevas estrategias comerciales que no lastren sus beneficios. Dado que se proponen objetivos a medio y largo plazo, la rentabilidad óptima de la empresa está lejos de suponer una rivalidad imposible para Tesla.
La empresa fabricante de vehículos eléctricos sigue vendiendo de forma imparable. El primer trimestre ha cosechado un incremento del 70% en la producción, con la venta de 25.000 nuevas unidades de sus modelos más emblemáticos. Consecuentemente, se ha visto beneficiada su cotización bursátil con un nuevo incremento del 5%.
La situación de Tesla ha mejorado en muy poco tiempo, tan rápido que no ha dado tiempo a reestructurarse a sus rivales. Sus acciones han pasado de 150 dólares la unidad a 290 dólares en un periodo de tan solo 12 meses. Esto supone un incremento que alcanza el 40% de su cotización total.
Llama la atención que las expectativas de la empresa se basan en la venta “tan solo” de apenas 76.200 vehículos eléctricos, cuando Ford vende más de 6 millones de unidades al año. Pese a ello, la cotización de Ford no le ha permitido aguantar en la Bolsa respecto a la nueva empresa de eléctricos.
General Motors, siguiente objetivo, mantiene una capitalización de unos 50.000 millones de dólares y, según las perspectivas, Tesla no tardaría ni un mes en superarle.