Si eres autónomo, te has decidido por montar una pequeña empresa o necesitas dinero para cualquier imprevisto familiar, una buena solución consiste en solicitar préstamos online. Esta opción resulta muy conveniente sobre todo en el caso de cantidades no excesivamente grandes.
Se trata de créditos rápidos y sumamente cómodos pero, por encima de todo, ofrecen unas mejores condiciones en comparación con los préstamos tradicionales. Asimismo, realizarlo de manera no presencial reduce considerablemente los costes añadidos, en primer lugar, para la propia entidad, pues se ahorra empleados y locales, lo que repercute, al fin y al cabo, en el precio final.
Por su parte, los intereses alcanzan un 9,95 % y los plazos para devolver el dinero son realmente amoldables, de hasta siete años. También se sale ganando en los diferenciales, al encontrarse por debajo de la banca tradicional. Basta comparar el 2,49 % del euríbor con el actual 2,81 % de los bancos o el 4,12 % de las cajas.
Al contrario de lo que pudiera parecer, solicitar minicréditos online conlleva una mayor transparencia en la información sobre las condiciones del préstamo de dinero que solicitamos. Los clientes las pueden leer directamente en Internet al tener que publicarse de forma oficial de manera completamente abierta.
No sólo eso, la rapidez en la tramitación es una de las ventajas más reseñables. De hecho, algunas de estas empresas especializadas en créditos rápidos como Vivus.es, se comprometen además a aprobar o rechazar la solicitud en menos de 15 minutos e ingresar el dinero directamente en la cuenta del usuario inmediatamente después.
Además, el cliente puede realmente elegir por sí mismo pues, al exponerse claramente todas las opciones de crédito, sabrá seleccionar mejor el préstamo más adecuado a sus necesidades. Se evita así tener que desplazarse hasta la entidad bancaria, donde será atendido por una única persona, que tal vez no se explique de forma realmente clara y no exponga todas las opciones posibles.